La presente portada corresponde a un ejemplar del diario "La Vanguardia Española" del 30 de marzo de 1974, la cual ofrece una singular y atípica noticia que ocupa toda la primera página de dicho periódico. Ese año coincidió con una oleada de avistamientos de presuntos platillos voladores por toda España.
Durante la noche del 29 anterior un reportero logró captar estas curiosas y misteriosas luces que invadieron el oscuro cielo de Málaga: "Forma luminosa en extremo. Transparente y de aspecto gaseoso. Color blanco muy brillante, con resplandor a derecha e izquierda preferentemente. Luz propia, desde luego, pero indeterminada por su aspecto raro, diríamos gaseoso. Dicha luz era fija", lo describió el locutor Antonio Barceló de Radio Peninsular de Málaga. Este fenómeno se dio también en Cádiz y se había repetido en más de una ocasión. Sin embargo, los escépticos lo atribuyen a la presencia de globos-sonda, al vuelo de aviones supersónicos o a una confusión lunar. Paralelamente, en el reportaje de este periódico dedicado a este fenómeno, se habla también de otros suceso más espectacular: un transportista perseguido en Salamanca por un objeto volador no identificado (OVNI) mientras conducía por la carretera.
Se llegó a la conclusión de que a pesar de los fraudes y falsas alarmas en la mayoría de casos detectados, es cierto que todavía quedan muchos casos sin resolver y que se trata de un fenómeno inexplicable. Quién sabe si el gran ufólogo Juan José Benítez será capaz de ofrecernos alguna posible respuesta.
