viernes, 13 de agosto de 2010

EL NOTICIERO UNIVERSAL (1888-1986)

El mismo año de la Exposición Universal de Barcelona, el día 15 abril 1888, la aparición del diario de tirada nacional EL NOTICIERO UNIVERSAL confirmó la nueva tendencia informativa del periodismo catalán. Hubo otros intentos de periódicos de la tarde, pero este fue el primero en resistir. Su propietario y director, el valenciano Francisco Peris Mencheta, fue corresponsal en la Segunda Guerra Carlina y había fundado diferentes periódicos en Valencia.
EL NOTICIERO UNIVERSAL, cuyo subtítulo era “Diario independiente de noticias, avisos y anuncios”, tenía una edición de tarde y otra de noche. Esto era ventajoso, pues se trataba de un periódico que informaba no solo de lo sucedido el día anterior, sino también de los hechos acaecidos durante el mismo día. Se convirtió así en el primer diario vespertino de España, con abundante información variada y extensa, alimentada por corresponsales en cada capital de provincia y en capitales europeas, incluso con noticias telegráficas.
En 1905 publicó un número especial conmemorativo del tercer centenario de la obra de Miguel de Cervantes “Don Quijote de la Mancha”.
A pesar del Real Decreto de 1924 que obligaba al descanso dominical de la mayoría de las editoriales de prensa, este periódico igualmente salió durante todos los días, siendo de los pocos que tenían permiso para hacerlo.
Con motivo de la celebración de la Exposición Internacional de 1929 en Barcelona, diversas ediciones sacaron suplementos temáticos en color.
Durante la Segunda República el director del periódico fue Enric Tubau. En estos años, mientras otros periódicos apostaron por el fotoperiodismo, EL NOTICIERO UNIVERSAL continuó muy fiel con su mismo formato y diseño, sin fotos pero sí con anuncios. Las fotos no eran un mero adorno sino un lenguaje alternativo, al que entonces el CIERO renunció para seguir con el tradicional. Los anuncios publicitarios, algunos de gran belleza, servían en parte para como medio de rentabilidad económica y financiar parte de la publicación.
Durante la Guerra Civil prosiguió su edición, esta vez colectivizado y bajo control sindical, convirtiéndose en un diario informativo del día a día del conflicto bélico pero con una fuerte censura de guerra. Desde su fundación hasta entonces, este periódico se había mantenido informativamente abierto y al margen de cualquier tendencia política. Ya en 1937 y 1938, debido a las restricciones de papel, las ediciones fueron reduciendo su número de páginas. Tras la llegada de las tropas franquistas en Barcelona, el 26 de enero de 1939, el periódico tuvo permiso para continuar publicándose gracias al retorno de sus antiguos propietarios.
Durante la década de 1940, debido a la escasez de recursos de la posguerra, a menudo las ediciones eran de tan solo una o dos hojas, es decir, de dos y cuatro páginas, sin ilustraciones ni fotografías y con noticias breves limitadas en recuadros o medias columnas.
A partir de la década de 1950 la situación fue mejorando y poco a poco cada edición recuperó el número de páginas original, llegando incluso a editar un suplemento de los deportes los lunes, cuando la mayoría de periódicos no salían. Ello hizo que en este día de la semana fuese uno de los periódicos más vendidos. El director era por aquel entonces Luís G. Manegat, el cual recibió un homenaje en 1956 y fue nombrado como “periodista de honor”.
Debe remarcarse que este periódico, durante casi toda su vida activa desde su fundación apenas cambió de formato, de modo que en tanto en dimensiones como en diseño mantuvo casi intacta su apariencia. Solamente hubo leves modificaciones propias de cada época. Así, hasta la década de 1930 las portadas contenían las ya clásicas esquelas mortuorias, durante la Segunda República destacaron los anuncios publicitarios, y a partir de la década de 1960 incorporó imágenes fotográficas tanto en la portada como en el interior. Entre esta década y la de 1970 surgió una nueva sección de arte de tres páginas, a cargo de Rafael Santos Torroella, convirtiéndose en la rúbrica más completa y de mayor nivel de la prensa publicada en Cataluña.
La redacción de EL NOTICIERO UNIVERSAL se ubicaba en el número 35 de la calle de Roger de Llúria (entonces Vía Layetana). Ocupaba un antiguo edificio que en 1963 fue reformado y modernizado con un diseño racionalista por el arquitecto Josep Maria Sostres Maluquer, lo que le mereció recibir el premio FAD de arquitectura en 1965.
Durante los años de la Transición hasta su desaparición, el periódico padeció una lenta decadencia que lo llevaría a su desaparición definitiva. Fue entonces cuando cambió por primera vez de formato, reduciendo su tamaño y rompiendo con su tradicional condición de diario vespertino barcelonés, hecho que le hizo perder calidad en todos los sentidos. El Banco Condal dotó al periódico de una nueva planta de impresión en San Just Desvern. Intervinieron sucesivamente el hotelero Joan Gaspart, el empresario socialdemócrata Amadeu Cuito Hurtado, amigo de Josep Pallach y nieto del editor del antiguo periódico semanal en catalán Mirador, y Aurelio Delgado, cuñado del jefe de gobierno Adolfo Suárez.
Entre 1978 y 1981, de manera provisional, el resucitado periódico sindicalista Solidaridad Obrera imprimió sus ediciones en la imprenta del edificio de la calle de Roger de Llúria, hasta su traslado en l’Hospitalet de Llobregat.
El 1980 José Tarín Iglesias dejó la dirección del periódico, pasando provisionalmente a Jordi Doménech, que había desempeñado el cargo de director adjunto. Habiendo tocado fondo, EL NOTICIERO UNIVERSAL fue adquirido por el uruguayo Carlos José Leo Antúnez, un aventurero que lo compró a bajo precio junto con el deportivo DICEN y la revista semanal DESTINO, enterrándolos en una fulgurante operación desarrollada entre octubre de 1984 durante el cual creó la sociedad DIARIOS UNIDOS S.A. (en substitución de la Editorial Mencheta), y mayo de 1986, fecha en que desapareció definitivamente.
Actualmente, en el edificio de la redacción, propiedad de AGBAR, ocupa en la planta baja el restaurante de diseño vanguardista NOTI que ofrece cocina creativa francesa y mediterránea.